Un día un
burro cayó a un pozo, no se había hecho daño pero por supuesto no podía salir.
El burro comenzó a rebuznar, mientras el propietario pensaba que cosa podía
hacer en tal situación. Finalmente el campesino tomó una decisión cruel,
concluyó que el burro era muy viejo, y que no servía más para hacer sus tareas
y por otro lado el pozo estaba seco y que de cualquier modo había que taparlo,
no valía la pena entonces esforzarse para sacar al animal del pozo, por el
contrario, llamó a sus vecinos para que le ayudaran a sepultar vivo al burro.
Cada uno de los vecinos con su pala comenzó a echar tierra dentro del pozo, el
burro no tardó en darse cuenta de lo que estaban haciendo con él y lloraba
desesperadamente. Después de un cierto número de paladas de tierra con gran
sorpresa de todos, el burro... se quedó callado. El campesino miró hacia el
fondo del pozo y quedó sorprendido con lo que vió, a cada palada de tierra que
le caía encima, el burro se liberaba haciéndola escurrir de su lomo y
rápidamente se subía sobre el montículo de tierra que se formaba debajo de él.
De esta manera en poco tiempo todos observaron como el burro alcanzó a subir
hasta el borde del pozo y así pudo salir trotando de él. La vida te tirará
siempre mucha tierra encima y de todo tipo, principalmente si te encuentras
dentro de un pozo, el secreto para salir de él, es simplemente sacudirse y dar
un paso hacia arriba, cada uno de nuestros problemas es un escalón hacia la
cima.
Recuerda ¡sacúdete y sigue!
Relexiones de Mariano Osorio
Recuerda ¡sacúdete y sigue!
Relexiones de Mariano Osorio
Gracias HABLAMOS por compartir con nosotros esta historia tan entrañable y emotiva.
ResponderEliminarHasta una próxima visita.
Gracias a ti por seguirnos, hasta la próxima
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